El Municipio de Ayapel cuenta con un área de un poco más de 144.300 hectáreas, tiene una población aproximada a los 30.000 habitantes, de los cuales más del 60 % se encuentran bajo del agua desde hace más de cuatro años.
La Ciénaga de Ayapel se encuentra ubicada en la Subregión denominada la Depresión Momposina que, por su tamaño de un poco más de 1.291.800 hectáreas es considerada como el área cenagosa más grande e importante de Colombia, en ella convergen los ríos Magdalena, San Jorge y Cauca. Esta Ciénaga tiene un cuerpo de agua de unas 40.000 hectáreas, en época de lluvias y unas 15.000 hectáreas en época de verano. Aquí vamos a tratar de analizar dos situaciones distintas, la primera será la de la ciénaga en sí y la segunda la del Municipio.
La ciénaga de Ayapel está ubicada en su totalidad en la jurisdicción del municipio del mismo nombre, como se dijo anteriormente forma parte de la Depresión Momposina, es el complejo cenagoso más importante de la cuenca del río San Jorge y contaba como tributarios principales el caño Barro, el caño San Matías, el caño Muñoz, la quebrada Escobillas y la quebrada Quebradona, pero actualmente el río Cauca, alimentado por las aguas del río Nechí, le está vertiendo un alto porcentaje de su caudal, por la parte occidental de la ciénaga, por los rompederos de Caregato, Santanita, Nuevo Mundo y Pedro Ignacio que quedan en Antioquia pero que entran a la ciénaga por los caños Muñoz y San Matías. Este no es el principal problema sino el que se produce cuando el Cauca, a su paso por el bajo Cauca Antioqueño (Tarazá, Cáceres, El Bagre, Nechí y Zaragoza) recoge la contaminación con mercurio producida en las minas de esos lugares y la deposita en la ciénaga. Esta situación no es permanente sino que ocurre cuando hay inundaciones que lavan los suelos del Bajo Cauca. Se consideró que en la época comprendida entre los años 80 y comienzos del 90 fue cuando se alcanzó el mayor auge en la minería de oro en el Bajo Cauca, razón por la cual la variación en la calidad del agua en la ciénaga fue muy notoria. Para esa ocasión, en 1.990, la CVS en análisis efectuados encontró contaminación con mercurio tanto en el agua como en los peces.
Las conclusiones también establecieron que la alta concentración sobrepasaba los límites permitidos internacionalmente y que, presumiblemente, se debían al consumo de pescado contaminado con mercurio. Afortunadamente se estableció que el bocachico era el pescado que menos concentración presentaba, pero el blanquillo, que posiblemente sea de bastante consumo, mostraba la más alta concentración.
La ciénaga de Ayapel, según estudios realizados por la CVS y otras entidades, mostró una diversidad de aves con registro de 62 especies, así como diversidad de peces con un registro de 44 especies. Igualmente fue una fuente de producción pesquera muy importante pero que, por diferentes motivos, ha venido disminuyendo sensiblemente.
Los datos comparativos que se tienen muestran que en el año 1970 se logró una captura de 30.000 toneladas, en el año de 1980 bajo a una captura de 20.000 toneladas y en el año 2001 solo se alcanzaron las 3.000 toneladas, lo que nos demostraba que la pesca ya había disminuido en un 90%. Esta situación también influyó en el trabajo de pescadores puesto que, de una cantidad de los que ejercían ese trabajo en forma permanente que llegaba casi a los 5.000 en faenas normales y que se incrementaba en un 40 % en época de subienda, la fuente de trabajo se rebajó en un porcentaje casi igual.
La Ciénaga de Ayapel se encuentra ubicada en la Subregión denominada la Depresión Momposina que, por su tamaño de un poco más de 1.291.800 hectáreas es considerada como el área cenagosa más grande e importante de Colombia, en ella convergen los ríos Magdalena, San Jorge y Cauca. Esta Ciénaga tiene un cuerpo de agua de unas 40.000 hectáreas, en época de lluvias y unas 15.000 hectáreas en época de verano. Aquí vamos a tratar de analizar dos situaciones distintas, la primera será la de la ciénaga en sí y la segunda la del Municipio.
La ciénaga de Ayapel está ubicada en su totalidad en la jurisdicción del municipio del mismo nombre, como se dijo anteriormente forma parte de la Depresión Momposina, es el complejo cenagoso más importante de la cuenca del río San Jorge y contaba como tributarios principales el caño Barro, el caño San Matías, el caño Muñoz, la quebrada Escobillas y la quebrada Quebradona, pero actualmente el río Cauca, alimentado por las aguas del río Nechí, le está vertiendo un alto porcentaje de su caudal, por la parte occidental de la ciénaga, por los rompederos de Caregato, Santanita, Nuevo Mundo y Pedro Ignacio que quedan en Antioquia pero que entran a la ciénaga por los caños Muñoz y San Matías. Este no es el principal problema sino el que se produce cuando el Cauca, a su paso por el bajo Cauca Antioqueño (Tarazá, Cáceres, El Bagre, Nechí y Zaragoza) recoge la contaminación con mercurio producida en las minas de esos lugares y la deposita en la ciénaga. Esta situación no es permanente sino que ocurre cuando hay inundaciones que lavan los suelos del Bajo Cauca. Se consideró que en la época comprendida entre los años 80 y comienzos del 90 fue cuando se alcanzó el mayor auge en la minería de oro en el Bajo Cauca, razón por la cual la variación en la calidad del agua en la ciénaga fue muy notoria. Para esa ocasión, en 1.990, la CVS en análisis efectuados encontró contaminación con mercurio tanto en el agua como en los peces.
Las conclusiones también establecieron que la alta concentración sobrepasaba los límites permitidos internacionalmente y que, presumiblemente, se debían al consumo de pescado contaminado con mercurio. Afortunadamente se estableció que el bocachico era el pescado que menos concentración presentaba, pero el blanquillo, que posiblemente sea de bastante consumo, mostraba la más alta concentración.
La ciénaga de Ayapel, según estudios realizados por la CVS y otras entidades, mostró una diversidad de aves con registro de 62 especies, así como diversidad de peces con un registro de 44 especies. Igualmente fue una fuente de producción pesquera muy importante pero que, por diferentes motivos, ha venido disminuyendo sensiblemente.
Los datos comparativos que se tienen muestran que en el año 1970 se logró una captura de 30.000 toneladas, en el año de 1980 bajo a una captura de 20.000 toneladas y en el año 2001 solo se alcanzaron las 3.000 toneladas, lo que nos demostraba que la pesca ya había disminuido en un 90%. Esta situación también influyó en el trabajo de pescadores puesto que, de una cantidad de los que ejercían ese trabajo en forma permanente que llegaba casi a los 5.000 en faenas normales y que se incrementaba en un 40 % en época de subienda, la fuente de trabajo se rebajó en un porcentaje casi igual.